Luigi Mangione vuelve al tribunal de Nueva York con un chaleco antibalas
El gobierno de EEUU todavía está considerando si solicitar para Mangione, acusado por el asesinato del CEO de la aseguradora UnitedHealthcare, la pena de muerte.
Nueva York--Actualizado a
Luigi Mangione, el presunto asesino del director ejecutivo de la aseguradora UnitedHealthcare, Brian Thompson, volvió este viernes al tribunal estatal de Nueva York portando un chaleco antibalas, en una audiencia en la que el juez ordenó a sus abogados presentar sus mociones antes del 9 de abril.
En una vista celebrada en el tribunal estatal de Manhattan, su abogada Karen Agnifilo pidió sin éxito al juez retrasar la presentación de mociones mientras el gobierno decide si solicita para él la pena de muerte en su caso federal.
El juez Gregory Carro rechazó la petición de la defensa y fijó el 9 de abril como fecha límite para presentar sus documentos judiciales. Por su parte, la Fiscalía tiene hasta el 14 de ese mismo mes para responder.
En declaraciones a la prensa tras la audiencia, la abogada se quejó de que "el gobierno federal todavía está considerando si solicitar (para Mangione) la pena de muerte, por lo que estamos luchando contra eso simultáneamente" mientras continúa el caso estatal, "lo que afecta a nuestra capacidad de reunirnos con él".
Mangione, que permanece bajo custodia en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, acudió hoy a la vista en Manhattan con sus manos esposadas a la espalda y vestido con jersey verde sobre una camisa blanca, pantalones caquis y un chaleco antibalas.
Once cargos
Agnifilo denunció las condiciones en las que las autoridades le trasladaron al tribunal: "Cuando voy a visitar a Luigi (a la prisión) me siento con él, no lleva esposas, camina libremente por la zona de visitas y nos sentamos juntos en una habitación sin que las fuerzas del orden se nos echen encima", apuntó.
En la audiencia de hoy, los fiscales revisaron las pruebas que han entregado a la defensa, entre las que se incluyen las imágenes de los hechos captadas por cámaras corporales de la policía (body cam), los informes policiales, los datos de un teléfono móvil encontrado cerca de la escena del crimen y archivos de la autopsia, según CNN.
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En su caso estatal, Mangione, de 26 años, está acusado de once cargos, entre los que se incluyen uno de asesinato en primer grado y otros dos de asesinato en segundo grado -uno de ellos como crimen de terrorismo- por los que se enfrenta a una pena máxima de cadena perpetua sin libertad condicional.
Hoy, fuera del tribunal, unas 30 personas mostraban su apoyo al acusado con pancartas en las que se leían frases como "Luigi antes que los multimillonarios parásitos" o "Puedes encarcelar a un hombre pero no a un movimiento".
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El apoyo mostrado a Mangione es reflejo del furor que ha generado su caso en el país, donde muchos lo consideran un héroe que ha hecho frente al negocio de las aseguradoras privadas; de hecho, justo hoy se ha superado el medio millón de dólares en un fondo de recaudación destinado a costear su defensa.
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